4ª REUNION

  ITINERARIO

1. Punto de partida y meta

Sus discípulos tendrán la misma misión: crear una comunidad de hombres y mujeres iguales y libres porque el poder que se pone por encima del hombre, se pone por encima de Dios. 

Jesús destruye toda pretensión de poder, ya que la grandeza y el poderío humanos no son valores a los que él renuncia por humildad, sino una injusticia que no puede aceptar.

2. Amor a Jesús y a su Evangelio
© Dar a conocer a Jesucristo y hacerlo amar.
© Fin de su vocación y el fin de las escuelas maristas.
© Jesús es para nosotros el rostro humano de Dios.  

3. Los Maristas de Champagnat tenemos tres lugares preferidos en los que Jesús nos revela a Dios de un modo privilegiado.

En Belén encontramos la inocencia, sencillez, dulzura e incluso debilidad de un Dios que es capaz de conmover los corazones más duros... No hay espacio para el temor ante un Dios que se ha hecho niño. Descubrimos a un Dios que ha plantado su tienda en medio de nosotros, y al que llamamos “hermano”.

Al pie de la Cruz nos quedamos sobrecogidos ante un Dios que nos ama sin reservas. Allí le encontramos compartiendo el sufrimiento físico y psicológico, la traición, el abandono y la violencia de los hombres y transformando esas experiencias. De esa manera entramos en el misterio del sufrimiento redentor y aprendemos la humilde fidelidad en el amor. Cristo crucificado es el signo y la más profunda expresión de un Dios que es amor.
En el Altar, en la Eucaristía, encontramos un lugar privilegiado para entrar en comunión con el Cuerpo de Cristo, unirnos a todos los miembros que lo componen y profundizar en nuestra relación con Jesús y su presencia en nuestras vidas.

a)  Tu fidelidad es grande
Este día será para ustedes memorable, en él celebrarán la fiesta al Señor, ley perpetua para todas las generaciones.
 
b) Alianza – Libertad
Cómo pagaré al Señor todo el bien que me ha hecho? Alzaré la copa de la salvación, invocando su nombre.
 
Mucho le cuesta al Señor la muerte de sus fieles. Señor, yo soy tu siervo, hijo de tu esclava; rompiste mis cadenas.

Te ofreceré un sacrificio de alabanza, invocando tu nombre, Señor. Cumpliré al Señor mis votos en presencia de todo el pueblo.

C) Vida en abundancia

Yo he recibido una tradición, que procede del Señor y que a mi vez les he transmitido:  Que el Señor Jesús, en la noche en que iban a entregarlo, tomó pan y, pronunciando la acción de gracias, lo partió y dijo:

«Esto es mi cuerpo, que se entrega por ustedes. Hagan esto en memoria mía.»
Lo mismo hizo con el cáliz, después de cenar, diciendo:
«Este cáliz es la nueva alianza sellada con mi sangre; hagan esto cada vez que lo beban, en memoria mía.»
Por eso, cada vez que coman de este pan y beban del cáliz, proclaman la muerte del Señor, hasta que vuelva.

d) En esto conocerán que son mis amigos
Él, que había amado a los suyos que estaba en el mundo, llevó su amor hasta el final

Llegó a Simón Pedro, y éste le dijo: - «Señor, ¿lavarme los pies tú a mí?»

Jesús le replicó:  - «Lo que yo hago tú no lo entiendes ahora, pero lo comprenderás más tarde.»
Pedro le dijo:  - «No me lavarás los pies jamás.»
Jesús le contestó:  - «Si no te lavo, no tienes nada que ver conmigo.»

 «¿Comprenden lo que he hecho con ustedes? Ustedes  me llaman "el Maestro" y "el Señor", y dicen bien, porque lo soy. Pues si yo, el Maestro y el Señor, les he lavado los pies, también ustedes deben lavarse los pies unos a otros; les he dado ejemplo para que lo que yo he hecho con ustedes, ustedes también lo hagan.»